El proyecto está dividido en cuatro plantas y ubicado en un mirador natural al Sur de la ciudad de Cuenca con condiciones topográficas relevantes mismas que se mantienen casi en su totalidad sin que el edificio llegue a la zona en donde las curvas de nivel son más pronunciadas.
Los espacios de parqueadero, plazas, estanque, escaleras de acceso y vías se han trabajado dentro de aquellas zonas más amplias y explanadas posibles, para afectar el relieve natural en menor grado. Por otro lado se ha considerado que las plantas baja y alta no se sobrepongan estrictamente sino más bien se encuentran desplazadas una sobre otra para acoplarse con lógica a la altura del terreno, aprovechando el desnivel natural.
Dentro del edificio se emplazan varias oficinas con sala de espera y su respectivas baterías sanitarias; todos los espacios cuentan con una comunicación inmediata a terrazas y plazoletas exteriores por medio de puertas corredizas y pivotantes de cristal.
El jardín interior y las escaleras permiten un sistema múltiple de relaciones entre los distintos sectores a través de un espacio interior que permite el ingreso de la naturaleza, visible a todas las áreas del conjunto arquitectónico.